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8 de marzo: Avances y retos en la igualdad laboral y la mediación en conflictos de género

  • Foto del escritor: Igor Fernandez Gonzalez
    Igor Fernandez Gonzalez
  • 8 mar
  • 2 Min. de lectura


El Día Internacional de la Mujer, celebrado cada 8 de marzo, es una fecha clave para reflexionar sobre los avances en materia de igualdad, pero también sobre los desafíos pendientes en el ámbito laboral. A pesar de los progresos normativos y sociales, la brecha de género, la discriminación y las dificultades en la conciliación siguen siendo barreras para muchas mujeres en el mundo del trabajo.


Brecha salarial y techo de cristal: una deuda pendiente

Uno de los principales desafíos en el derecho laboral es la persistencia de la brecha salarial de género. A nivel global, las mujeres siguen percibiendo salarios inferiores a los de los hombres en puestos de igual responsabilidad. Además, fenómenos como el techo de cristal o la escasa representación femenina en puestos directivos reflejan una desigualdad estructural que las normativas laborales intentan corregir, pero que aún requiere un compromiso real de empresas y administraciones.

En este sentido, la Ley de Igualdad Salarial y la Transparencia Retributiva han supuesto un avance en España, exigiendo a las empresas planes de igualdad y auditorías salariales. Sin embargo, su aplicación efectiva sigue siendo un reto, especialmente en pymes y sectores tradicionalmente masculinizados.


La mediación como herramienta para la equidad laboral

El derecho laboral no solo regula, sino que también busca resolver conflictos de manera eficiente. Aquí es donde la mediación laboral se convierte en una herramienta clave para abordar situaciones de discriminación, acoso laboral y conciliación de la vida personal y profesional.

En un contexto donde el acoso sexual y por razón de género sigue presente en muchos entornos laborales, la mediación puede ofrecer un espacio de diálogo seguro, donde las partes puedan encontrar soluciones sin necesidad de recurrir a procesos judiciales largos y costosos. La creación de protocolos internos en empresas y la figura del mediador laboral especializado en igualdad son pasos fundamentales en esta dirección.


Conciliación y corresponsabilidad: un reto colectivo

Otro de los puntos clave en la igualdad laboral es la conciliación de la vida personal y profesional. Aunque las normativas han avanzado en permisos de maternidad y paternidad igualitarios, la realidad es que las mujeres siguen asumiendo una mayor carga en el cuidado de hijos y dependientes. Esto impacta directamente en su desarrollo profesional y en su acceso a puestos de mayor responsabilidad.

La mediación también puede desempeñar un papel crucial en la negociación de medidas de flexibilidad horaria, teletrabajo o adaptación de jornada, evitando así conflictos que puedan derivar en renuncias forzadas o situaciones de desigualdad.



Conclusión: el 8M como un impulso hacia el cambio

El Día Internacional de la Mujer debe ser un recordatorio de que la igualdad en el ámbito laboral no es solo un derecho, sino una necesidad para construir sociedades más justas y sostenibles. El derecho laboral y la mediación tienen un papel fundamental en la resolución de conflictos y en la implementación de medidas que garanticen la equidad.

Desde ILM.eus, apostamos por una cultura laboral basada en la igualdad, el respeto y la resolución de conflictos de manera efectiva, promoviendo espacios de trabajo más inclusivos y justos para todas las personas.


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